Crean guía para un adecuado manejo comunicacional de epidemias
URUGUAY | Comunicación |Por PrensaCDP – La Oficina de Unicef en Uruguay informó este martes que “a partir del manejo de información en otras epidemias la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, la Agencia de Salud de las Naciones Unidas y Unicef crearon la guía “El estigma social asociado con el COVID-19”, que contiene varias orientaciones para la comunicación en torno al #COVID19.
Este material busca dotar a periodistas y comunicadores, formas y maneras que le permitan contar con mayores recursos a la hora de comunicar sobre la Pandemia, de una manera asertiva y oportuna.
Los responsables del proyecto destacan que “la información basada en hechos, no el miedo, impedirá que se disemine el nuevo coronavirus (COVID-19)”.
De esta manera, el poder acceder a esta guía en forma gratuita, permitirá masificar los lineamientos que plantean estas organizaciones para un manejo comunicacional responsable de la Pandemia y de esta manera evitar la “infodemia”, la cual se caracteriza por la “desinformación y rumores que se puede diseminar más rápido que el brote epidémico del nuevo coronavirus (COVID-19)”.
Trabajar sobre estos parámetros permitirá a la sociedad y a sus medios de comunicación contribuir a evitar los “efectos negativos, incluyendo la estigmatización y discriminación de personas provenientes de áreas afectadas por el brote epidémico”.
Resulta clave entender que en momentos como los que estamos viviendo “se necesita solidaridad colectiva e información clara y practicable para apoyar a las comunidades y personas afectadas por este nuevo brote epidémico”, según destacan los impulsores de la guía.

¿Qué es el estigma social?
El estigma social en el contexto de la salud es la asociación negativa entre una persona o un grupo de personas que comparten ciertas características y una enfermedad específica.
En un brote epidémico, esto puede significar que las personas sean etiquetadas, estereotipadas, que se las discrimine, que se las trate por separado y/o que experimenten una pérdida de estatus debido a una percibida conexión con una enfermedad.
Este tipo de trato puede afectar negativamente a quienes tienen la enfermedad, así como a quienes los cuidan, a sus familias, amigos y comunidades. Las personas que no tienen la enfermedad, pero comparten otras características con ese grupo, pueden también sufrir estigmatización.
El brote epidémico actual de COVID-19 ha causado estigmatización social y comportamiento discriminatorio hacia personas de cierto origen o contexto, así como hacia cualquier persona que se percibe haya estado en contacto con el virus.
¿Por qué el COVID-19 está causando tanta estigmatización?
El nivel de estigma asociado con el COVID-19 se basa en tres factores principales:
Es comprensible que la población sienta confusión, ansiedad y miedo. Desafortunadamente, estos factores también están contribuyendo a alimentar estereotipos dañinos.
Es una enfermedad nueva y en torno a la cual existen todavía muchas incógnitas. Frecuentemente tenemos miedo a lo desconocido. Es fácil asociar ese miedo a “los otros”.
Las palabras importan
Cuando hablamos de la enfermedad del coronavirus tanto ciertas palabras (por ejemplo: caso sospechoso, aislamiento…) como cierto lenguaje, pueden tener significados negativos para las personas y alimentar actitudes estigmatizantes.
Pueden perpetuar presunciones o estereotipos negativos existentes, fortalecer asociaciones falsas entre la enfermedad y otros factores, crear miedo generalizado, o deshumanizar a quienes tienen la enfermedad. Esto puede llevar a que las personas eviten ser examinadas, testeadas y puestas en cuarentena.
Recomendamos que en todos los canales de comunicación, incluidos los medios, se utilice lenguaje centrado en la persona como prioridad, que respete a las personas y las empodere. El lenguaje utilizado en los medios de comunicación es especialmente importante, porque da forma al lenguaje popular y a las comunicaciones sobre el nuevo coronavirus (COVID-19).
La cobertura periodística negativa tiene el potencial de influir sobre cómo se percibe y se trata a las personas que se sospecha tienen el nuevo coronavirus (COVID-19), así como a los pacientes, sus familias y las comunidades afectadas.
Hay muchos ejemplos concretos sobre cómo el uso del lenguaje inclusivo y la terminología menos estigmatizante pueden ayudar a controlar epidemias y pandemias de VIH, TB y la gripe H1N1.
Guía “El estigma social asociado con el COVID-19” AQUI
Fuente: Unicef | Uruguay